Bella vista vibró con el festival de doma y folclore Valles y Cumbres
- Diario Libre

- 17 feb
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El sábado, Bella Vista se convirtió en el corazón de la tradición criolla con la realización del Festival de Doma y Folclore Valles y Cumbres, organizado por la agrupación Gauchos Iglesianos. Desde temprano, el predio se llenó de familias, paisanos y amantes del folclore, que llegaron con ganas de disfrutar de una jornada cargada de emoción, destreza y música.

Desde las 9 de la mañana, los visitantes comenzaron a instalarse en el predio, armando su rincón en esta gran fiesta popular. Se veían grupos sentados en ronda, compartiendo mate bien caliente, sopaipillas doradas, tabletas caseras y pan recién horneado, que se repartían entre charlas y risas. Más allá, los más experimentados encendían los fogones y empezaban a asar la carne, mientras otros se acomodaban en improvisadas mesas de truco, donde los desafíos se jugaban con picardía y bromas criollas.

Las destrezas criollas fueron las encargadas de abrir la jornada con exhibiciones de habilidad a caballo y pruebas de campo que dejaron en claro el talento y la pasión de los participantes. A medida que el sol ganaba intensidad sobre la Cordillera, llegó el momento más esperado, la gran jinetada, que hizo latir con fuerza el corazón del público. Con la presencia de tres tropillas destacadas, entre ellas la de Maldonado de San Juan, los jinetes se midieron en montas espectaculares, despertando ovaciones y aplausos de los presentes.
Cuando la tarde comenzaba a despedirse, los juegos criollos llenaron el predio de risas y adrenalina. Carreras de sortija, la cinchada y otros desafíos tradicionales invitaron a grandes y chicos a participar, fortaleciendo el espíritu festivo y familiar del evento.

Con la llegada de la noche, la música tomó el mando y el escenario se encendió con la presentación del Taller Folclórico Raíces de Cuyo, que con sus danzas dio el puntapié inicial a una velada llena de emoción. Luego, las voces y guitarras de El Rejunte Sureño, Tres para el Canto, Mañeros y el Dúo Herencia hicieron vibrar a la multitud con un repertorio de zambas, chacareras y tonadas cuyanas, que fueron coreadas y bailadas hasta la madrugada.

El intendente Jorge Espejo, quien acompañó el evento durante casi toda la jornada, se mostró emocionado por la convocatoria y destacó la importancia de mantener vivas estas tradiciones:

"Esto es lo que nos define como iglesianos, la pasión por nuestra cultura, el amor por nuestras raíces y el orgullo de compartir nuestras costumbres con las nuevas generaciones. Hoy vimos familias enteras reunidas, niños jugando entre los fogones, paisanos mostrando su destreza en la doma y la gente bailando bajo las estrellas. Estos festivales no solo mantienen viva nuestra identidad, sino que nos unen como comunidad. Desde el municipio vamos a seguir apoyando cada iniciativa que haga crecer nuestras tradiciones y fortalezca el alma de nuestro pueblo", expresó con entusiasmo.

El Festival Valles y Cumbres dejó su huella en Bella Vista, consolidándose como una fiesta criolla imperdible. Entre mates, jineteadas y folclore, los presentes vivieron una jornada que quedará en la memoria de quienes sienten en el pecho el latido de la tradición. El proximo festival grande esta previsto para Semana Santa.
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