Día de la Minería con sello histórico: Orrego celebró en Veladero los 20 años de la mina

Por primera vez, el acto oficial por el Día de la Minería se realizó directamente en una mina. El escenario elegido fue Veladero, en Iglesia, donde el gobernador Marcelo Orrego encabezó la celebración en el mismo corazón de una de las explotaciones más importantes del país. La jornada también coincidió con el 20° aniversario del inicio de operaciones del yacimiento.

El evento reunió a gran parte del gabinete provincial, entre ellos el ministro de Minería, Juan Pablo Perea, el secretario de Ambiente, Federico Ríos, y el titular de Producción, Gustavo Fernández, además de intendentes de zonas mineras, representantes de cámaras empresariales y ejecutivos de Barrick, como su director para Sudamérica, Marcelo Álvarez.

Durante el acto, Orrego destacó que Veladero “es un símbolo de transformación productiva en San Juan” y subrayó que el 91% de los más de 3.700 trabajadores son sanjuaninos, al igual que las 290 empresas que forman parte de su cadena productiva. “Esta mina demuestra que es posible hacer minería con desarrollo, innovación, cuidado ambiental y compromiso social”, afirmó el mandatario.

Además, aprovechó para homenajear a todos los trabajadores del sector: “A quienes están en este campamento, a los que ponen el cuerpo cada día en condiciones extremas, y a quienes hacen posible que esta industria siga creciendo con responsabilidad”, expresó.

Por su parte, Marcelo Álvarez remarcó que Veladero ya exportó más de 16 mil millones de dólares desde su apertura, y que el 85% de ese valor quedó en el país en forma de salarios, impuestos y compras a proveedores. También destacó el crecimiento de la participación femenina en la mina, que pasó del 5% en 2020 al 15% actual.

El recorrido del gobernador por Veladero incluyó visitas a distintas áreas operativas, como el mirador a 4.500 metros de altura, un frente de trabajo con maquinaria pesada, el taller de camiones —donde se realizó un emotivo homenaje con bandera y canto del himno— y el campamento donde viven los trabajadores.

Con este gesto simbólico, Orrego buscó reforzar su respaldo a una minería sustentable, cercana a los trabajadores y clave para el desarrollo económico de San Juan.