Los niños de Rodeo salieron a celebrar la noche de Halloween en una jornada de disfraces y cargada de diversion [fotos]

Los niños de la Escuela 751 Provincia de Santa Cruz, se congregaron en una alegre celebración de Halloween, recorriendo almacenes en Rodeo para pedir dulces y disfrutar de una tarde mágica. Los comerciantes participaron en el juego, sumándose a la diversión de una festividad que unió a toda la comunidad.

La celebración de Halloween en Rodeo, organizada por un nena de Rodeo llamada Morena Chavez (8), desde hace 2 meses comenzó a invitar a sus amiguitos y compañeros de la escuela para esta fecha, logrando llenar de disfraces y sonrisas las calles del pueblo. Este evento, que convocó a mas de 70 niños y sus familias, tuvo como punto de encuentro la plaza Benita Molina. "Para los chicos, Halloween es una oportunidad de compartir momentos divertidos, lejos de cualquier connotación religiosa", expresó uno de los padres que acompañaba a su hijo.

La tradicional frase "dulce o truco" fue la consigna de la noche mientras los pequeños, disfrazados de personajes como superhéroes y brujas, iban de almacén en almacén en busca de golosinas. Los comerciantes de Rodeo, en un gesto solidario, no solo les entregaron dulces sino que también participaron activamente del juego. "Nos encanta ver la alegría de los chicos, para nosotros también es una ocasión especial", comentó uno de los dueños de almacenes que colaboró con la iniciativa.

Esta actividad, que ha ido ganando popularidad en Rodeo, se centra exclusivamente en el disfrute de los más pequeños, quienes ven en Halloween una oportunidad para pasarla bien.

"Para los niños, Halloween no tiene nada que ver con rituales o creencias; es simplemente una excusa para divertirse y disfrazarse", explicó una madre.

La iniciativa busca fomentar un ambiente seguro donde los chicos puedan vivir una experiencia mágica.

Los vecinos de Rodeo y los comerciantes se unieron así para hacer de Halloween una celebración segura y llena de magia, donde lo importante fue la alegría de los niños y el fortalecimiento de la comunidad. Este tipo de eventos demuestra el valor de compartir y de respetar las costumbres de quienes solo buscan disfrutar, promoviendo la diversión en un entorno familiar y seguro.