Milei lanzó una dura advertencia tras ignorar a Jorge Macri y Villarruel en el Tedeum
- Diario Libre
- hace 17 minutos
- 2 Min. de lectura
En el marco del acto por el 25 de Mayo, el presidente Javier Milei volvió a agitar la interna oficialista con un mensaje contundente y cargado de señales. Luego de participar del Tedeum en la Catedral Metropolitana, el mandatario evitó saludar al jefe de Gobierno porteño, Jorge Macri, y a la vicepresidenta Victoria Villarruel, y publicó en redes sociales una frase que no pasó desapercibida: “Roma no paga traidores”.

La tensión quedó expuesta una semana después del triunfo de La Libertad Avanza en las elecciones legislativas de la Ciudad, donde los libertarios y el PRO compitieron por separado. El resultado dejó al macrismo en tercer lugar, cortando una hegemonía de casi dos décadas en el distrito.
Sin nombrarlos directamente, Milei apuntó a los responsables del desdoblamiento electoral en CABA, una decisión que, según él, lo obligó a presentar un candidato propio. “Cuando Jorge Macri decidió desdoblar, me forzó a involucrarme”, dijo días atrás, y reforzó su malestar mencionando al asesor catalán Antoni Gutiérrez-Rubí, al que calificó como responsable de la “campaña sucia”.
En otro posteo, Milei escribió: “Si se es bueno con los malos —con quienes traicionan, mienten y calumnian— se termina siendo muy malo con los buenos”. Cerró su mensaje con un ataque directo: “Saludos para chantalán Gutiérrez-Rubí y otras basuras varias”, en alusión al consultor y a otras figuras políticas no mencionadas por nombre.
La publicación fue acompañada por una cita del medio La Derecha Diario, que justificó el desplante del Presidente por la supuesta campaña de difamación del PRO porteño durante los comicios. También replicó un mensaje del cineasta oficialista Santiago Oría, quien acusó al gobierno de la Ciudad de contratar a un “experto en campañas sucias” y cuestionó su falta de códigos.
En este contexto, la tensión entre Milei, Villarruel y Jorge Macri suma un nuevo capítulo, y deja en evidencia que la interna en el oficialismo —lejos de apaciguarse— sigue escalando.
Comments