Vecinos de Jáchal le dan tregua al intendente Matías Espejo hasta el lunes para cumplir la Ordenanza Agua Segura

Productores y vecinos exigieron respuestas inmediatas tras la aparición de peces muertos en el Dique Cuesta del Viento. El jefe comunal pidió plazo hasta el lunes para determinar si podrán realizarse los análisis.

Vecinos y productores de Jáchal se concentraron este viernes por la mañana en la Plaza San Martín para reclamarle al intendente Matías Espejo la ejecución urgente de la Ordenanza Agua Segura, normativa que obliga al municipio a realizar controles periódicos de la calidad del agua potable. La movilización se dio en medio de una creciente preocupación por la aparición de miles de peces muertos en el Dique Cuesta del Viento, hecho que reavivó los temores por una posible contaminación en la cuenca del río Jáchal.

Los manifestantes esperaron durante varias horas a que Espejo los recibiera. Cuando finalmente salió a dialogar con ellos, explicó que los análisis no se están llevando adelante por “cuestiones legales” vinculadas a la ordenanza vigente. La respuesta generó malestar entre los presentes, quienes insistieron en que los estudios “no pueden seguir demorándose” ante la gravedad de la situación ambiental.

Espejo aseguró que buscará un camino legal alternativo que permita avanzar con los análisis de inmediato y solicitó plazo hasta el lunes para confirmar si será posible realizarlos. Aunque accedieron a esperar, los vecinos advirtieron que retomarán las manifestaciones si no reciben una respuesta favorable.

Durante el encuentro, entregaron al intendente una nota formal con el pedido de estudios y un presupuesto detallado para su ejecución. Además, plantearon que el Ejecutivo podría impulsar una ordenanza extraordinaria para habilitar el pago urgente de los análisis, considerando la posible emergencia ambiental.

El conflicto tomó mayor dimensión luego de que la Unidad Fiscal del Norte iniciara una investigación bajo la carátula de “envenenamiento de agua”, y tras la incorporación de nuevos informes técnicos de la Asamblea Jáchal No Se Toca, que cuestionan las mediciones oficiales sobre los niveles de oxígeno en el dique. Mientras la Secretaría de Ambiente atribuyó la mortandad de peces a bajos valores de oxígeno disuelto, los estudios independientes señalan niveles normales, lo que abre la posibilidad de presencia de metales pesados u otros contaminantes.

La Ordenanza Agua Segura fue aprobada en 2015 tras los derrames en Veladero y obliga al municipio a realizar monitoreos periódicos, algo que —según el reclamo vecinal— no se habría cumplido desde la asunción de Espejo en 2023. El Concejo Deliberante pidió un informe para conocer los motivos de la falta de controles, y esta semana también se sumó el apoyo del presbítero Gustavo Vaca, quien presentó una solicitud formal para la realización urgente de los estudios.

Los vecinos remarcaron que no están dispuestos a seguir esperando y pidieron además la intervención del gobernador Marcelo Orrego para garantizar la seguridad ambiental de Jáchal e Iglesia. Ahora, todas las expectativas están puestas en el lunes, cuando el intendente deberá definir si avanzará finalmente con los análisis postergados.