En Iglesia comenzaron las multas a civiles que manipulen pirotecnia y clausuras a comercios que las vendan

Refuerzan los controles para garantizar el cumplimiento de la ordenanza que prohíbe la pirotecnia sonora en todo el departamento

En una decisión que prioriza la salud pública y la protección de los sectores más vulnerables, el Concejo Deliberante de Iglesia sancionó la Ordenanza N.º 1908-C.D.-2020, que prohíbe de manera absoluta la comercialización, tenencia, donación y uso de pirotecnia sonora en todo el departamento. A pocos días de reforzarse los controles, ya comenzaron las multas y la clausura de comercios que incumplen la normativa vigente.

Desde la Comisaría 22ª de Rodeo confirmaron que en los últimos días se recibieron varias denuncias por el uso y presunta venta de pirotecnia. En ese marco, las fuerzas de seguridad informaron que existen comercios identificados en la comunidad que podrían estar comercializando estos elementos prohibidos, por lo que se avanzará con las clausuras correspondientes, tal como lo establece la ordenanza municipal.

La medida se inscribe en una tendencia más amplia que atraviesa a toda la provincia de San Juan. Durante décadas, las celebraciones estuvieron marcadas por el uso masivo de fuegos artificiales, pero esa costumbre comenzó a disminuir a partir de una mayor toma de conciencia social sobre los riesgos que implica la pirotecnia sonora, tanto para las personas como para los animales. En paralelo, numerosos municipios avanzaron con regulaciones propias que restringen o prohíben su uso y comercialización.

Actualmente, en la Legislatura de San Juan se analiza un proyecto de ley que busca prohibir en todo el territorio provincial el uso de cohetes y petardos de alto impacto sonoro. El debate se da en un momento clave, en la antesala de las fiestas de Navidad y Año Nuevo, cuando históricamente se incrementa el uso de estos artefactos. El objetivo de la iniciativa es claro: impedir la comercialización, el suministro gratuito y el uso recreativo de cualquier elemento pirotécnico que genere fuertes explosiones sonoras.

En la provincia ya son numerosos los departamentos que cuentan con normativas similares. Entre ellos se encuentran Rivadavia, Pocito, 9 de Julio, Capital, Rawson, Chimbas, Caucete, Jáchal, 25 de Mayo, Valle Fértil, Iglesia, Sarmiento, Santa Lucía, Albardón y San Martín.

Sin embargo, en el departamento de Iglesia persisten situaciones que generan preocupación. A pesar de la existencia de una ordenanza clara, en los últimos días se registraron casos de menores de edad utilizando pirotecnia, lo que expone no solo una falta de control, sino también una grave ausencia de responsabilidad social. Vecinos advierten sobre la falta de ética tanto de algunos comerciantes que continúan vendiendo estos productos, como de padres y adultos responsables que no educan ni previenen.

La problemática adquiere una dimensión aún más sensible si se tiene en cuenta que en Iglesia existen numerosos casos de personas dentro del espectro autista, para quienes los estruendos representan un verdadero padecimiento. A esto se suma el impacto negativo en las mascotas, cuyos dueños denuncian episodios de desesperación, estrés y accidentes provocados por el ruido de las explosiones.

Desde este medio se hace un llamado a la reflexión y a la empatía colectiva, solicitando también a las comunidades religiosas que respeten la ordenanza municipal y prioricen el bienestar común, evitando el uso de bombas y pirotecnia sonora durante las fiestas patronales. El respeto por la normativa y por el prójimo aparece hoy como una responsabilidad compartida que busca construir celebraciones más seguras, inclusivas y conscientes.