La variante H3N2 ya fue detectada en Chile y el Malbrán analiza muestras para confirmar su posible ingreso al país

La nueva cepa de influenza, identificada como subclado K, avanza en la región y genera preocupación sanitaria por su rápida propagación y aumento de internaciones

La denominada “supergripe” H3N2 continúa su expansión en América Latina y encendió alertas en la región luego de que el Ministerio de Salud de Chile confirmara el primer caso del subclado K, una variante de la influenza que presenta mayor capacidad de propagación y de evasión parcial de la inmunidad previa. En la Argentina, el Instituto Nacional de Enfermedades Infecciosas ANLIS-Malbrán se encuentra analizando muestras para determinar si la cepa ya circula en el país.

Desde la cartera sanitaria chilena señalaron que la detección del caso era un escenario esperado, en función del comportamiento epidemiológico global del virus. Según informaron, es probable que en los próximos días se identifiquen nuevos casos positivos a medida que avancen los estudios de secuenciación genética que se encuentran en curso.

El subclado K de la influenza A H3N2 ya había sido identificado recientemente en México y, en los últimos días, también se confirmó su presencia en Perú y Colombia. Especialistas advierten que, en los países de Sudamérica, las condiciones climáticas propias de la temporada estival podrían favorecer una mayor circulación del virus, a diferencia de lo que ocurre en el hemisferio norte.

En la Argentina, fuentes del Instituto Malbrán indicaron que actualmente se están secuenciando muestras de H3N2 recibidas durante el mes de diciembre en el Laboratorio Nacional de Referencia. El objetivo es establecer si corresponden al subclado K, caracterizado por su capacidad de sortear parcialmente la inmunidad adquirida por infecciones previas o vacunación.

Hasta el momento, la información oficial señala que la variante K no fue detectada en territorio argentino. No obstante, las autoridades sanitarias no descartan que el escenario pueda modificarse en el corto plazo, especialmente por el movimiento de personas hacia y desde países donde ya existe circulación confirmada del virus.

Por ahora, el Ministerio de Salud de la Nación no emitió comunicados específicos dirigidos a la población sobre un eventual cambio en la situación epidemiológica. En Chile, en cambio, tras la confirmación del primer caso, las autoridades reforzaron las recomendaciones vinculadas a la vacunación antigripal.

En ese país, se instó especialmente a completar los esquemas de vacunación a los grupos considerados de mayor riesgo, entre ellos adultos mayores de 65 años, personas gestantes, pacientes con enfermedades crónicas, niños de entre seis meses y cinco años y trabajadores de la salud. Asimismo, se reiteró la importancia de mantener medidas preventivas básicas, como la higiene frecuente de manos, el aislamiento ante la aparición de síntomas respiratorios y la consulta oportuna al sistema de salud en caso de signos de gravedad.

El avance del subclado K mantiene en alerta a los sistemas sanitarios de la región, mientras se intensifica la vigilancia epidemiológica para anticipar posibles escenarios de mayor impacto durante los próximos meses.