Casposo se reactiva: prevén completar la puesta a punto en julio

Rubén Femenía, gerente de la operación de Casposo, confirmó que la reactivación de la mina calingastina avanza y que en julio se prevé finalizar la puesta a punto de las instalaciones.

Desde el cierre de la mina, la empresa ha trabajado en la búsqueda de mineral y en la obtención de fondos para la inversión. En enero iniciaron la inspección de la planta, analizando equipos y determinando qué repuestos deben reemplazarse. Una vez finalizada esta etapa en febrero, comenzará la reparación, con el objetivo de reiniciar operaciones entre julio y agosto.

Un "nuevo Casposo" con menor producción y menos personal

La mina operará con una producción reducida en comparación con su etapa inicial. Anteriormente, Casposo producía entre 8.000 y 10.000 onzas de oro mensuales, mientras que en esta nueva etapa proyecta entre 2.100 y 2.300 onzas mensuales. En consecuencia, la cantidad de personal también será menor: de los 500 trabajadores directos que tuvo en su auge, ahora contará con 120 en la planta de procesos, mientras que la explotación minera será tercerizada, generando más empleo indirecto.

Alianza con Hualilán y proyección de vida útil

Casposo también procesará mineral de Hualilán, lo que permitirá extender la vida útil de la planta. Con los recursos propios y el reprocesamiento del depósito de colas, se estima que la operación durará seis años, pero con el aporte de Hualilán podría extenderse a ocho años, con la expectativa de seguir explorando y sumar más recursos.

Inversión y respaldo financiero

Para la puesta en marcha, Casposo obtuvo un crédito de 7 millones de dólares del Banco San Juan. Hasta el momento, ha recibido 1,5 millones, y los desembolsos continuarán a medida que avance el mantenimiento de la mina.

Impacto en Calingasta

Casposo ha dejado una huella significativa en la comunidad. La inversión en infraestructura energética permitió conectar Calingasta al sistema provincial, y las regalías y fideicomisos generaron obras clave, como mejoras en el suministro de agua potable y centros culturales.

Finalmente, Femenía transmitió un mensaje esperanzador: "Calingasta tiene un enorme potencial minero, y aunque Casposo sea un proyecto más modesto en esta etapa, puede volver a ser un motor de desarrollo para la región".