Estados Unidos anunció un amplio acuerdo comercial con la Argentina: apertura de mercados, menos aranceles y nuevas reglas para bienes y servicios

La Casa Blanca confirmó la firma de un acuerdo marco de comercio e inversiones entre ambos países, orientado a profundizar la cooperación económica y ampliar las oportunidades bilaterales. El entendimiento fue rubricado por los presidentes Donald Trump y Javier Milei.

El gobierno estadounidense formalizó este jueves un nuevo esquema comercial con la Argentina, un acuerdo amplio que busca dinamizar el intercambio entre ambas economías mediante la reducción de aranceles, la eliminación de barreras regulatorias y la apertura de mercados estratégicos. El anuncio se dio a conocer tras la firma del convenio en Washington.

Según el comunicado oficial, el pacto se apoya en principios compartidos sobre democracia, libertad económica y mercados abiertos. Entre los objetivos centrales se destacan la generación de condiciones más previsibles para el comercio, el impulso a las exportaciones y la atracción de inversiones en sectores clave.

El acuerdo establece un acceso preferencial para bienes estadounidenses como medicamentos, maquinaria, tecnología, dispositivos médicos, automóviles y productos agroindustriales. A cambio, Estados Unidos suprimirá aranceles vinculados a insumos y recursos naturales utilizados por la industria farmacéutica, además de mejorar las condiciones para la comercialización bilateral de carne vacuna.

Argentina, por su parte, eliminará diversas barreras no arancelarias que afectaban las importaciones de origen estadounidense. Entre ellas, la eliminación de trámites consulares y la gradual supresión del impuesto estadístico. Asimismo, aceptará normas técnicas estadounidenses o internacionales en sectores como tecnología, automotriz y equipamiento médico, lo que permitirá el ingreso de vehículos fabricados bajo estándares federales norteamericanos y el reconocimiento de certificaciones emitidas por la FDA para fármacos y dispositivos médicos.

El texto también incorpora compromisos en materia de propiedad intelectual. Argentina reforzará la protección de patentes, reducirá demoras administrativas y adoptará criterios internacionales en regulaciones de marcas, indicaciones geográficas y combate a la falsificación.

En el ámbito agrícola, el país abrirá su mercado al ganado y a diversos productos alimentarios de Estados Unidos, además de simplificar los registros sanitarios para carnes y derivados. También asumirá el compromiso de no limitar el uso de términos específicos en alimentos de origen estadounidense.

Otro eje del acuerdo se centra en estándares laborales y ambientales. Argentina adoptará la prohibición de importar bienes producidos con trabajo forzado, reforzará mecanismos de fiscalización y aplicará medidas alineadas a convenios internacionales. En lo ambiental, ambas partes colaborarán en la lucha contra la tala ilegal, la eficiencia en el uso de recursos y la implementación de obligaciones acordadas en la OMC sobre subsidios a la pesca.

El convenio incorpora, además, un capítulo de seguridad económica, con un trabajo coordinado para enfrentar prácticas comerciales desleales de terceros países, mejorar los controles de exportación y fortalecer la seguridad en inversiones. También se establece un marco para facilitar el comercio digital, que incluye el reconocimiento de firmas electrónicas estadounidenses y la garantía de libre transferencia internacional de datos sin discriminación.

Ambos gobiernos avanzarán en la redacción del texto definitivo y en los procedimientos formales necesarios para la entrada en vigencia del acuerdo. Su implementación será revisada periódicamente mediante mecanismos de seguimiento bilateral.

Los principales puntos del acuerdo

• Apertura comercial y reducción de aranceles

• Argentina dará acceso preferencial a productos estadounidenses (medicinas, químicos, maquinaria, tecnología, autos, dispositivos médicos y productos agrícolas).

• EEUU eliminará aranceles a ciertos insumos y recursos que Argentina exporta para uso farmacéutico.

• Ambos países mejorarán el acceso bilateral para la carne vacuna.

• Eliminación de barreras no arancelarias

• Argentina retira licencias de importación y elimina formalidades consulares para productos de EEUU.

• Eliminación progresiva del impuesto estadístico para bienes estadounidenses.

Normas y certificaciones

• Argentina aceptará estándares y certificaciones de EEUU e internacionales sin exigir evaluaciones adicionales.

• Aceptará vehículos fabricados bajo normas de seguridad y emisiones estadounidenses.

• Reconocerá certificados de la FDA para dispositivos médicos y fármacos.

Propiedad intelectual

• Medidas contra el mercado de bienes falsificados.

• Compromiso para mejorar normas de patentes, indicaciones geográficas y reducir el atraso en otorgamiento de patentes.

Sector agropecuario

• Argentina abre su mercado a ganado vivo estadounidense y permitirá aves de corral dentro de un año.

• No limitará términos usados en quesos y carnes.

• Simplificación de registros para carne bovina, derivados y carne porcina.

Trabajo y derechos laborales

• Argentina reafirma estándares laborales internacionales.

• Adoptará la prohibición de importar productos elaborados con trabajo forzoso u obligatorio.

Medio ambiente

• Medidas para combatir la tala ilegal.

• Cumplimiento pleno del acuerdo de la OMC sobre subsidios a la pesca.

• Impulso a la eficiencia en sectores como minerales críticos.

Seguridad económica y regulatoria

• Coordinación contra prácticas comerciales distorsivas de terceros países.

• Alineamiento en controles de exportaciones, seguridad de inversiones y combate a la evasión arancelaria.

Comercio digital

• Argentina reconocerá a EEUU como jurisdicción adecuada para la transferencia de datos.

• No habrá discriminación contra servicios o productos digitales estadounidenses.

• Reconocimiento de firmas electrónicas válidas según normas de EEUU.

Cooperación estratégica futura

• Enfoque especial en minerales críticos y estabilización del mercado global de soja.

• Revisión continua del acuerdo mediante mecanismos bilaterales ya existentes.