Tres mujeres difamaron a una menor en Caucete y la Justicia ordenó que se disculpen públicamente

Una adolescente de 17 años oriunda de Caucete fue víctima de una grave difamación por parte de tres mujeres que divulgaron falsos rumores sobre su salud durante su último año de secundaria. El caso fue denunciado por su familia y derivó en una causa judicial que terminó con una medida inédita: la Justicia obligó a las responsables a pedir disculpas públicas.

20 de Junio 2025

El hecho ocurrió en 2024, cuando la joven comenzó a ser señalada en su entorno escolar y social por padecer una supuesta enfermedad grave. Los rumores, completamente falsos, se viralizaron y marcaron su vida escolar, empañando momentos significativos como su viaje y fiesta de egresados.

Ante el daño sufrido, su familia realizó una presentación judicial. El caso fue investigado bajo el Sistema Acusatorio y llegó a una audiencia de formalización en la que se imputó a Florencia Allende, Agustina Fernández y Débora Romina Lago, quienes reconocieron su responsabilidad en la difusión de los dichos y accedieron a retractarse públicamente.

Lo particular de este proceso fue que, por primera vez en este tipo de causas, la víctima contó con abogados querellantes que representaron sus intereses: Benjamín Balmaceda, Santiago García y Renato Ramiro López. La jueza Mabel Moya homologó el acuerdo alcanzado entre las partes y dictaminó que las disculpas debían ser públicas y permanentes.

Las publicaciones se realizaron por distintos medios. Allende utilizó su cuenta en la red social X, donde escribió:

"Quiero pedir disculpas públicas a X. Mis dichos sobre ella son falsos, lamento profundamente haberla ofendido. Nunca X estuvo enferma. He tenido a la vista los estudios médicos que lo demuestran. Me retracto de lo que afirmé en mi cuenta en la plataforma X. Y expreso mi arrepentimiento por haber causado un grave daño a la imagen y honorabilidad de X".

Por su parte, Fernández publicó en Instagram:

"Pido disculpas públicas a X. Lo que afirmé sobre ella es falso. Lamento profundamente haberla ofendido. Me retracto de lo que dije en un mensaje de audio de WhatsApp, el cual se viralizó. Expreso mi arrepentimiento por haber causado un grave daño a su imagen y honorabilidad".

Finalmente, Lagos se presentó en una emisora radial de Caucete, donde leyó en vivo su mensaje:

"Pido disculpas públicas a X. Lo que afirmé sobre ella es falso. Me retracto de lo dicho a viva voz y frente a testigos. Lamento profundamente haberla ofendido y expreso mi arrepentimiento por el grave daño causado".

La resolución judicial establece que las publicaciones no podrán ser eliminadas de las redes sociales, asegurando su carácter reparador. El fallo sienta un precedente en materia de protección a menores ante difamaciones públicas y demuestra que la Justicia puede intervenir eficazmente en situaciones que, aunque muchas veces minimizadas, provocan un daño profundo en la vida de las personas.