Demandará casi 6.000 trabajadores durante su etapa de construcción
- Diario Libre
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El proyecto cuprífero ubicado en Iglesia actualizó su Informe de Impacto Ambiental e informó que la necesidad de empleo será mayor a la prevista inicialmente. También se detallaron cambios en plazos de obra, operación y consumo de agua.
30 de Agosto de 2025

Con la segunda actualización del Informe de Impacto Ambiental (IIA) del proyecto Josemaría, la empresa Vicuña informó al Gobierno de San Juan que la demanda de mano de obra será significativamente superior a lo estimado en documentos anteriores. Durante la etapa de construcción se prevé un pico de aproximadamente 5.900 trabajadores en sitio por róster, mientras que en la fase de operación se requerirá un promedio de 1.060 personas.
Las cifras marcan un incremento en comparación con las proyecciones de informes previos, que calculaban un máximo de 4.000 trabajadores en la construcción y 800 durante la operación.
El nuevo cronograma establece 45 meses de construcción, incluyendo 9 meses de trabajos tempranos y 12 meses de preproducción, seguidos de 25 años de operación, 5 años de cierre y 15 años de post-cierre. En total, el emprendimiento demandará alrededor de medio siglo de actividad vinculada a la mina emplazada en el departamento Iglesia.
En cuanto al diseño, la compañía confirmó un aumento en el inventario explotable a 1.425 millones de toneladas de mineral y una tasa de procesamiento nominal de 175.000 toneladas por día.
Consumo de agua y alternativas de suministro
El informe también actualiza las proyecciones de uso de agua. Según el escenario más conservador, la mina requerirá un promedio anual de 1.200 litros por segundo de reposición externa durante los periodos de máxima producción. A lo largo de la construcción y operación, el flujo total proyectado asciende a 1.027 hectómetros cúbicos, de los cuales 890 corresponderán a aportes externos y 137 a ingresos adicionales.
Para garantizar el abastecimiento, el diseño contempla un esquema multifuente que incluye los campos de pozos A y B, un nuevo campo en la zona de La Majadita y, en etapas posteriores, el uso de agua desalinizada proveniente de Chile, sujeto a la obtención de los permisos correspondientes.
Asimismo, la compañía informó que optimizó los procesos para que el 73% de la demanda total de agua de proceso sea cubierta mediante recirculación en planta y recuperación desde el depósito de colas, en línea con la tasa de producción prevista.
Fuente: Mineria & Desarrollo
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