La Juez de Paz Aguilera, frena la Liguilla tras la violenta pelea

"No vamos a permitir que la violencia se normalice en el deporte", afirmó la jueza Victoria Aguilera, tras suspender la competencia. La drástica medida busca proteger a los jugadores y exigir responsabilidades ante una organización ausente.

Luego de los gravísimos hechos de violencia ocurridos durante la final de la liguilla amateur entre Tóxicos FC y LBC, la jueza de Paz del departamento Iglesia, doctora Victoria Aguilera, resolvió suspender todos los partidos restantes del torneo. La decisión se tomó en un contexto de caos, con jugadores agrediéndose brutalmente y la total ausencia de medidas mínimas de seguridad.

"Los hechos ocurridos representan un riesgo real para la integridad física de todos los presentes. Como autoridad, no puedo mirar hacia otro lado", sostuvo Aguilera al comunicar la suspensión.

El partido, disputado en la cancha del Club San Martín, terminó en una batalla campal. Las imágenes que circularon por redes sociales muestran patadas dirigidas a la cabeza de un futbolista ya caído, corridas y golpes por parte de jugadores y simpatizantes. Frente a esto, Aguilera fue tajante, "Lo que pasó no es un exceso, es un acto de violencia inaceptable. No se puede permitir que una actividad deportiva derive en semejante brutalidad".

Pero la violencia no fue el único motivo de la medida. "No había presencia policial, no había ambulancia ni cobertura médica. Tampoco hay evidencia de que exista un seguro para los jugadores", denunció la jueza. "Estamos hablando de una competencia sin ninguna garantía, sin regulación, y con una organización que actúa en la sombra".

Aguilera también aclaró que la liguilla en cuestión "no tiene relación con la Liga Iglesiana de Fútbol, una institución seria que promueve valores deportivos y cuenta con reglas claras. Esta liguilla, en cambio, funciona sin controles y deja a los jugadores completamente expuestos".

A su vez, pidió un informe exhaustivo a los organizadores del torneo. "Necesitamos saber quiénes son los responsables, cómo manejan el dinero, qué medidas adoptan para prevenir este tipo de hechos. Hoy, todo eso es un vacío preocupante", advirtió.

Consultada sobre el futuro de la competencia, Aguilera fue clara,"Mientras no existan condiciones mínimas de seguridad y organización, esta liguilla no puede continuar. La suspensión no es un castigo, es un acto de protección. Estoy velando por la vida y la integridad de los participantes".

Finalmente, la jueza apeló a la reflexión colectiva, "El deporte debe ser un espacio de encuentro, no un escenario de violencia. Si no frenamos esto ahora, el próximo incidente puede terminar en tragedia. Y entonces, ya será demasiado tarde".